La organización de un evento al aire libre (conocido como outdoor training en el argot de eventos de empresa) siempre es un reto que nos apasiona a los que “nos dedicamos a esto”. En un evento de estas características, hay que conjugar elementos diferentes, en contextos distintos, con distintas personas con las que a veces no tenemos una especial afinidad, para un único fin.
Ese único fin podría ser el elemento común al que todos miran sin preocuparse más que de ir de la forma prevista y al lugar previamente indicado. Pero hoy, las cosas ya no funcionan así.
Los sistemas de organización y las estructuras han cambiado y ya no se trata de hacer los clásicos (y utilísimos en algunos momentos) juegos y actividades al aire libre, sino que hay que aplicar el entorno empresarial actual, dentro del mismo juego. Esa debe ser la innovación que muchos, pero no todos, aplican en las actividades “outdoor”. Todo ha cambiado, por lo que el diseño de estos interesantes eventos, también ha cambiado.
Una de las características del mundo que vivimos en los últimos años es que nos movemos en entornos variables, inciertos, complejos y ambiguos. Nada hay seguro salvo el cambio, que ha decidido estar presente en cada actuación. La capacidad de adaptación a lo incierto, teniendo como premisa los objetivos marcados con antelación es la nueva forma de actuar. Ya nada es igual que hace unos meses y negarse a algo así supone dirigirse irremediablemente al fracaso profesional y personal.
Con este ambiente de trabajo me encargaron, hace unas semanas, el diseño de una actividad que innove, y haga ver a los alumnos (de una máster de la Universidad Politécnica de Madrid) la forma más clara del entorno profesional actual. Mi decisión fue aplicar un entorno VUCA (conocido por sus siglas en inglés Volatility, Uncertainty, Complexity and Ambiguity) con las mismas actividades clásicas pero diseñadas y temporizadas de forma completamente distinta.
En la actividad, se han incluido elementos que están presentes en la escena profesional de todo líder.
Los participantes y sus equipos podrían verse obligados a cambiar su planteamiento inicial. Todo esto va a servir para:
1. A tener un aprendizaje constante.
2. Desarrollar la incómoda capacidad para adaptarse a los cambios.
3. Saber valorar la integridad interna y externa del equipo.
4. Trabajar de manera colaborativa.
5. Tener constancia y determinación por el fin último.
6. Ser empáticos con la organización y resto de equipos y compañeros.
7. Tener una comunicación fluida y clara.
8. Aprender de los errores y corregirlos lo antes posible
Además se instó a realizar el desarrollo del evento con principios Lean Management
Los principios LEAN básicos, debieron tenerlos presentes los participantes en todo momento y para tal fin debieron responder a unas preguntas que sirvieron de análisis final:
1) Valor. Qué debes hacer para cumplir los objetivos y satisfacer el cumplimiento de la misión.
2) Cadena de valor: a)De qué forma resuelvo los problemas conmigo y con mi equipo.b) Cómo gestiono y gestionamos la información que recibo. c)Cómo analizo y mezclo todo para cumplir el resultado final.
3) Flujo de valor. Qué hago siempre para dar valor a mi trabajo dentro del equipo, de qué forma garantizo que mi actitud potencia al equipo del que formo parte.
4) Producción “pull”. Cómo ajustas la información recibida (asimilándolo al “just in time”) para conseguir la eficiencia del equipo.
5) Perfección y análisis. Esta parte se realizó al final de todo el evento para valorar la forma de encarar los retos planteados y sacar conclusiones comunes como cierre de la actividad.
El resultado fue más que satisfactorio y ha servido, una vez más, para poner a prueba a profesionales y futuros profesionales.
Durante más de dos días, han tenido que ver más allá de lo inicialmente planteado, han tenido que afrontar situaciones adversas tanto físicas como intelectuales y lo más importante, han aprendido y se han dado cuenta, cómo reaccionan tanto ellos como el resto de compañeros de equipo en estas situaciones.
