Párate a pensar por un momento. Lee despacio este breve artículo.
¿Cuántas veces te has sentido triste por tu pasado? Esto en muchas ocasiones condiciona la forma de vivir el día presente y nos hace dar vueltas y vueltas a algo que ya no podemos corregir y por lo que nada podemos hacer.
¿Cuántas veces te has angustiado por lo que puede pasar? Además, podríamos hacer otra pregunta ¿cuántas veces algo que temías podía pasar luego no ha pasado? ¿te das cuenta como nos angustiamos por irrealidades?
Por eso lo mejor, es vivir el ahora, vivir en el tiempo justo que manejamos en este momento. El único tiempo real es el que tienes ahora, leyendo este breve artículo, el ahora de mirar la habitación de tu casa, el ahora de contemplar un paisaje, de ver a tu pareja, a tu familia…
Tu único tiempo real es el que puedes manejar y manejando el ahora puedes construir el futuro.
Lo contrario es querer dar forma a algo que no puedes tener, bien porque se ha pasado, bien porque todavía no se ha formado y de lo que hagas ahora, dependerá ese futuro.
Por lo tanto, vive el ahora, disfruta de lo que tienes. Disfrútate.