Muchas veces nos quebramos la cabeza queriendo tener todo en nuestras manos, teniendo el control de todo lo que tenemos a nuestro alrededor y no poder hacerlo nos produce ansiedad que pueden desembocar en trastornos mayores. ¿Qué te parece si simplificamos lo que SI podemos controlar?
- Lo que quieres aprender. Esto depende de ti, de tu voluntad y de tus gustos que encima si es algo que quieres y te gusta seguro que te lo puedes permitir. Además como es algo que te gusta lo harás con entusiasmo.
- Tu gratitud por lo que tienes. ¿Cuándo ha sido la última vez que has dado gracias por lo que tienes? Somos poco conscientes que pese a todo tenemos motivos para dar las gracias por nuestra casa, por nuestra familia, por nuestro trabajo o por al menos tener ser un lugar donde ir cuando nos sentimos enfermos. Agradecer lo que tenemos es también querernos a nosotros.
- Lo que haces. Claro que podemos controlar lo que hacemos, ahí tenemos nuestra voluntad en marcha. Lo mismo que podemos evitar lo que no queremos hacer.
- Quienes te rodean. Elegimos a nuestros amigos y también a la familia que queremos tener más cerca. Esta elección nos hace más grandes y también nos ayuda a seguir, a superarnos. ¿A qué personas has elegido para que estén cerca de ti, para compartir una copa de vino, una comida, una cena? Piénsalo.
- Lo que dices. ¿Te has dado cuenta que lo que dices depende completamente de ti? Tus palabras salen de ti por lo tanto es de tu total control. Si ves que a veces dices cosas que no quieres…. quizá te convenga reflexionar en lugar de reaccionar ante algo. ¿Cuándo ha sido la última vez que has reflexionado antes de decir algo?
- Lo que te esfuerzas. Qué has hecho por tí y para ti. En qué medida lo que tienes y lo que has conseguido es por tu esfuerzo. Seguramente en muchas ocasiones por lo tanto sabes que lo que tienes es por tus decisiones, por tu voluntad y por tu esfuerzo. Esto es de tu total control y no valen las excusas, los es que… y los pero…
- Como tratas a los demás. La forma de relacionarte y tratar con los demás, depende de ti, es una actitud que puedes controlar. Cómo te ven en tu trato, cómo tratas a otras personas cuando normalmente hablar con ellas y cuando te cuentan sus cosas. Reflexiona a ver si das a tal o cual persona la importancia que estas te demandan.
- Lo que piensas y crees. ¡Cuántas veces damos mil vueltas a las cosas y cuántas veces esto no sirve para nada! ¡Cuántas veces nos hacemos un mundo de algo, nos asustamos prematuramente y luego… no pasa nada! Por eso nuestros pensamientos y lo que creemos que pueda pasar o no pasar, es voluntad nuestra y SI lo podemos controlar.
Un comentario
Me gustó mucho la definición